El fantasma de la recesión en Japón

Después de dos trimestres consecutivos de contracción económica, Japón no se ha salvado de la recesión, un abismo en el que han caído EEUU, Reino Unido, Italia y Alemania, y al que les seguirán otros muchos, entre ellos España. La recesión japonesa no responde exactamente al perfil de la que sufren otros países desarrollados. Ni los bancos japoneses se han colapsado, ni su sector inmobiliario se ha derrumbado. El problema japonés es consecuencia fundamentalmente de su dependencia del crecimiento internacional. Ha sido la abrupta caída de las exportaciones la que ha llevado a la segunda economía del planeta a su primera recesión en siete años. A la debilidad de la demanda internacional se ha sumado la fortaleza del yen, que ha encarecido sensiblemente los productos japoneses, deteriorando su sector exterior. En noviembre se desplomaron las exportaciones y el déficit comercial volvió a alcanzar un nuevo récord.